Homenaje a la cultura japonesa de la que tanto he absorbido a nivel artístico y culinario, tanto el anime como el ramen siempre han estado presentes para acompañarme, especialmente un viernes a la noche. Esta obra habla de desconectar. De desconectar a través de hobbies como, por ejemplo, la cocina, que es una de las actividades que más me ayudan a relajarme.